"Candela" Jiménez

UN LANZADOR DE EXPORTACION: 

         “Candela” Jiménez está en la memoria colectiva del béisbol tocopillano.

         En los barrios, en el diamante, en las esquinas, en los bares, todo el mundo cuenta que “tuvo todo para ser un triunfador en las grandes ligas, pero nunca quiso dejar su puerto”.

         Esta verdadera leyenda nació en Tocopilla el 27 de julio de 1940. Desde pequeño se ganó el apodo que lo hizo famoso en Chile. Le costaba pronunciar para pedir “helado de canela” y solicitaba “helado de candela”; pero en los diamantes de béisbol se le conocía como el “brazo de oro”, dada la calidad de su juego.

         Siendo niño jugaba en la calle, en los sitios eriazos, en el estadio de fútbol, en la escuela, en cualquier lugar.

         En sus recuerdos está presente la figura del comerciante Salvador Prinea, quién pagaba un peso por botella quebrada, que colocaba sobre un pedestal para determinar qué muchacho tenía mejor puntería y lanzaba más fuerte.

         También se cuenta que un caballero que salía de la cárcel lo vio jugar en la cancha de unión Prat, le dijo: “Ponte contra el viento si querís aprender a tirar curvas”.  Después nadie le aguantaba sus curvas.

         Su puesto natural fue lanzador y su vida deportiva la consagró en el Club Remache, integrado por pescadores y trabajadores portuarios.

         A los 15 años comenzó a practicar béisbol y al año siguiente fue seleccionado tocopillano. Viajó a lima a jugar un cuadrangular, con figuras como Juan Lanyon, Aurelio Almonacid, Fernando Balbontín, Mario Alzamora, Adolfo Pereira “uno de los mejores catcher que existían en ese tiempo y Jesús Ávila, un entrenador venezolano que le enseñó a lanzar la pelota haciendo esas curvas, que le hicieron tan famoso a nivel internacional”.

         Se inició en primera base pero sus entrenadores al comprobar la potencia de su lanzamiento, lo convirtieron en uno de los mejores pitcher de Chile y Sudamérica.

         Participó en cuatro sudamericanos y 16 nacionales, cuyas estrellas engalanan la historia de los tocopillanos: CAMPEONES POR SIEMPRE donde su nombre está escrito con letras de oro.  

         Logró conseguir 16 Títulos para Tocopilla. Siempre lanzó los 9 innings sin inconvenientes. Pérez Milla fue uno de los pocos bateadores que logró sacarle un home run.

“Yo tiraba muy fuerte, nadie me aguantaba el brazo, lanzaba la pelota como una bala”.